29/01/2021 ·
Un viaje a Petra es algo más que un simple viaje. En realidad, es una fascinante y misteriosa aventura a través de la historia. Esta joya de mundo antiguo permaneció oculta en el desierto de Jordania durante casi dos milenios. Durante siglos, los beduinos mantuvieron en secreto su existencia, preservando así sus tesoros arqueológicos.
Petra fue la capital del reino nabateo nace más de dos mil quinientos años. Fueron los griegos quienes la bautizaron con este nombre, que hace referencia a sus estructuras esculpidas en la roca. Tanto ellos como los romanos dejaron aquí su huella.
Siglos después, la ciudad entró en decadencia y fue definitivamente abandonada en el siglo VI d.C. Sus calles y edificios desaparecieron en las arenas del desierto y su nombre fue olvidado.
Pero Petra regresó desde los abismos del tiempo en el año 1812, cuando el explorador suizo Jean Louis Burkhardt dio con la ciudad y le devolvió su lugar en la historia. Hoy es la principal atracción turística de Jordania y figura por derecho propio en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Qué ver en Petra
Después de recorrer casi 300 kilómetros desde la capital jordana, Amman, es fácil entender la razón por la cual Petra permaneció oculta durante tanto tiempo a los ojos del mundo. La ciudad está literalmente esculpida en las paredes rocosas de un complejo sistema de cañones que durante siglos estuvieron sepultados por la arena del desierto.
Hoy sin embargo, después de décadas de excavaciones arqueológicas, todos sus tesoros y monumentos están a la vista. Las escenas rodadas aquí para la película Indiana Jones y la última cruzada fueron el mejor folleto turístico para Petra y la razón de que tantos viajeros de todo el mundo acudan allí año tras años.
El Siq y el «Tesoro» de Petra
El acceso a Petra consiste en una estrecho desfiladero de paredes de arenisca rojiza conocido como Siq. Este pasillo conduce hasta uno de los edificios más impresionantes del lugar: el Jazneh o «Tesoro», tallado en la roca hace miles de años por los antiguos nabateos.
La Ciudad Baja
Muchos de los restos de la ciudad romana de Petra se conservan bastante bien, sobre todo los que se concentran en la llamada «Ciudad Baja». Además del Templo de Qasr el Bint, se encuentra al pie del gran acantilado de Jubta la Tumba de la Urna, de más de 40 metros de altura, que fue transformada en iglesia cristiana.
Coronando la Ciudad Baja se levanta una gran roca conocida como Zibb Attuf, desde la cual se pueden disfrutar de magníficas vistas de Petra y del desierto.
El Deir, el «monasterio de Petra»
Algo apartado del centro de Petra se alza la monumental fachada de un edificio llamado El Deir (o el «monasterio»). Fue labrado en el siglo II d.C. sobre una gran pared de arenisca amarilla, con una altura de nada menos que 42 metros.
La belleza del desierto de Wadi Rum
Petra se localiza en el corazón del Wadi Rum, uno de los desiertos más espectaculares del mundo. El aventurero T.H. Lawrence (el famoso Lawrence de Arabia) lo describió como un lugar «tocado por la mano de Dios«. Las fuerzas de la naturaleza han esculpido en él toda clase de formas caprichosas: monolitos de piedra, grandes espacios vacíos, dunas de colores…
Son muchos los viajeros que se apuntan a una excursión al desierto con un guía beduino. Contemplar sus grandiosos paisajes y dormir bajo su cielo estrellado es una experiencia casi mágica.
Viaje a Petra: datos prácticos para la visita
El mejor modo de visitar Petra es contratar una excursión programada con un guía que se encargue de todo. Lo único de lo que deben ocuparse los viajeros es de llevar calzado cómodo, ropa fresca, algo para cubrirse la cabeza y mucha agua. Y es que Petra, incluso en los meses de invierno, sigue estando en el desierto y es un lugar muy caluroso.
En Petra encontraremos varias tiendas de recuerdos (son muy populares las botellas llenas de arena de colores del desierto) y algunos restaurantes donde probar algunas delicias de la gastronomía local así como el clásico té a la menta.
Moneda de Jordania
El dinar jordano (ISO 4217 JOD) es la moneda oficial del Reino de Jordania desde el año 1950. Se divide en 10 dirhams, 100 qirsh o piastras y 1.000 fulus. Esta es la moneda que los turistas deben usar en su visita a Petra.
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